Sobrepesca:la pesca comercial y recreativa explotó en gran medida las poblaciones de truchas nativas del lago. Las prácticas pesqueras no reguladas y mal gestionadas contribuyeron a la disminución de sus poblaciones.
Alteración del hábitat:la construcción de represas y otros proyectos de infraestructura hidráulica fragmentaron y alteraron los hábitats naturales del lago. Estos proyectos inhibieron la migración de peces, afectando sus actividades de desove y alimentación.
Contaminación:Las aguas residuales no tratadas, los desechos industriales y los escurrimientos agrícolas contaminaron el lago, degradando la calidad del agua. Los contaminantes químicos y el enriquecimiento de nutrientes impactaron negativamente la salud y la supervivencia de las poblaciones de truchas.
Deforestación:La tala generalizada de bosques, especialmente a lo largo de las riberas de los ríos y afluentes, provocó la erosión del suelo y un aumento del transporte de sedimentos. Esto afectó negativamente a los hábitats de las truchas, reduciendo la calidad del agua y la cobertura para los peces.
Especies invasoras:La introducción de especies no nativas intensificó aún más la crisis de las truchas nativas del lago Champlain. Especies como la trucha arco iris y varias variedades de trucha marrón se introdujeron con fines recreativos y finalmente superaron a las truchas nativas por alimento y hábitat.
Como resultado de estas presiones agravadas, las poblaciones de truchas nativas en el lago Champlain experimentaron una disminución significativa. Algunas especies, como la trucha de lago, alguna vez fueron la captura más preciada, pero estuvieron al borde del exterminio y se las consideró funcionalmente extintas en la década de 1930. Si bien se implementaron esfuerzos de conservación y manejo en los años siguientes, las truchas nativas no se han recuperado completamente a las abundancias históricas que alguna vez adornaron el lago Champlain.
A pesar de los desafíos, los esfuerzos en curso se centran en restaurar y conservar las poblaciones de truchas nativas restantes. Esto implica regular las prácticas de pesca, mejorar la calidad del agua, restaurar los hábitats ribereños y realizar investigaciones para comprender mejor los factores que influyen en su supervivencia. Proteger y conservar las poblaciones restantes de truchas nativas en el lago Champlain es de suma importancia para mantener la integridad ecológica y la biodiversidad de este lago icónico de América del Norte.