La evidencia apunta a un tiburón blanco como el responsable del incidente de Cape Cod. Los informes de testigos presenciales afirmaron que presenciaron aletas que se asemejaban a un tiburón blanco durante el ataque. Además, las marcas de mordeduras infligidas a la víctima sugieren una gran criatura marina. Además, los expertos han enfatizado que los tiburones blancos acechan habitualmente en la costa de Cape Cod durante ese período. Por lo tanto, es muy posible que un tiburón blanco estuviera detrás del ataque.