En las últimas décadas, el sabroso cangrejo azul (Callinectes sapidus) ha estado expandiendo su área de distribución hacia el norte a lo largo de la costa atlántica de América del Norte. Esta extensión del área de distribución se ha atribuido a varios factores, incluido el aumento de la temperatura del océano, cambios en los niveles de salinidad y una mayor disponibilidad de hábitats adecuados.
El cangrejo azul es una especie de aguas cálidas que abunda más en la Bahía de Chesapeake y las regiones del Atlántico Medio. Sin embargo, en los últimos años, se ha encontrado cada vez más en aguas más septentrionales, incluidas Nueva Inglaterra y Canadá. Este movimiento hacia el norte se ha relacionado con el aumento de la temperatura del océano, que ha creado condiciones más favorables para que el cangrejo sobreviva y se reproduzca en estas áreas.
Además, los cambios en los niveles de salinidad también han influido en la extensión del área de distribución del cangrejo azul. Los cangrejos azules son relativamente tolerantes a una amplia gama de salinidades, pero prefieren salinidades entre 15 y 30 partes por mil (ppt). A medida que las aguas costeras se vuelven más salinas debido al cambio climático, se crean hábitats más adecuados para que prospere el cangrejo azul.
Finalmente, la mayor disponibilidad de hábitats adecuados también ha contribuido a la ampliación del área de distribución del cangrejo azul. Los cangrejos azules son criaturas que viven en el fondo y prefieren fondos arenosos o fangosos. En los últimos años, ha habido un aumento en la cantidad de hábitat adecuado disponible para el cangrejo azul debido a la expansión de las marismas y otros hábitats costeros.
La extensión del área de distribución del cangrejo azul tiene varias implicaciones ecológicas y económicas. Ecológicamente, podría generar competencia con especies de cangrejos nativos y cambios en la red alimentaria. Económicamente, podría brindar nuevas oportunidades para la pesca de cangrejos comercial y recreativa en las regiones del norte.