Los SFC se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones, que incluyen:
* Accionamientos de velocidad ajustable para motores eléctricos.
* Sistemas de alimentación ininterrumpida (UPS)
* Sistemas de energía renovable
* Equipo médico
* Automatización industrial
Los SFC normalmente se componen de los siguientes componentes:
* Un rectificador, que convierte CA en CC.
* Un enlace de CC, que almacena energía y proporciona un voltaje estable al inversor.
* Un inversor, que convierte CC nuevamente en CA a la frecuencia deseada
Los SFC se pueden clasificar en dos tipos principales:
* Convertidores de fuente de voltaje, que utilizan un enlace de CC para proporcionar un voltaje constante al inversor
* Convertidores de fuente de corriente, que utilizan un enlace de CC para proporcionar una corriente constante al inversor.
Los convertidores de fuente de voltaje son más comunes que los convertidores de fuente de corriente. Por lo general, se utilizan para aplicaciones donde se requiere un alto nivel de precisión, como transmisiones de velocidad ajustable.
Los SFC son una forma versátil y eficiente de convertir CA de una frecuencia en CA de otra frecuencia. Se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones y desempeñan un papel fundamental en el funcionamiento de muchos sistemas eléctricos modernos.
A continuación se ofrece una explicación simplificada de cómo funciona un convertidor de frecuencia estático:
1. El rectificador convierte el voltaje de entrada de CA a CC.
2. La tensión CC se almacena en el enlace CC.
3. El inversor convierte el voltaje CC nuevamente a CA a la frecuencia deseada.
4. Luego, el voltaje CA de salida se filtra y regula según sea necesario.
La frecuencia de la tensión CA de salida está determinada por la frecuencia de conmutación del inversor. La frecuencia de conmutación suele ser mucho más alta que la frecuencia del voltaje CA de entrada. Esto permite que el SFC alcance un alto nivel de precisión en la frecuencia de salida.
Los SFC son una forma muy eficiente de convertir CA de una frecuencia en CA de otra frecuencia. Suelen tener una eficiencia superior al 90%. Esto los convierte en una buena opción para aplicaciones donde la eficiencia energética es importante.