¿Por qué? Cuanta más actividad en línea realicen, mayor será su susceptibilidad a la publicidad dirigida.
El estudio, que fue publicado en la revista "Marketing Science", encontró que este efecto era cierto incluso después de controlar otros factores, como la demografía de los espectadores, los ingresos y el interés por el producto. Y en una era de programas en streaming, puede tener más verdad para los espectadores más jóvenes.
¿La teoría? Los espectadores de televisión que dividen su atención pueden quedar absortos en sus teléfonos (por ejemplo, leyendo artículos, poniéndose al día en las redes sociales o comparando compras) en detrimento de los mensajes comerciales de una marca y más receptivos a las presentaciones ofrecidas junto con esa actividad en línea, creando así dos puntos de acceso.
A medida que los espectadores vean cada vez más televisión tradicional en vivo desde sus teléfonos móviles o tabletas, los anunciantes verán mayores oportunidades y probablemente mayores tasas de conversión con sus mensajes.