Un 'dólar digital' estadounidense podría tener consecuencias de largo alcance en el sistema financiero mundial.
El presidente de EE. UU., Joe Biden, ordenó al gobierno federal que estudie la creación de un dólar digital, un movimiento con el potencial de cambiar la forma en que se mueve y usa el dinero en todo el mundo.
Antes de que su pedido resulte en un dólar virtual, habrá numerosos impactos y riesgos importantes a considerar primero.
Estas son algunas preguntas clave:
¿Qué forma tomaría un dólar digital?
Seguiría siendo un dólar emitido por el banco central de la Reserva Federal de EE. UU., como todos los billetes y monedas de EE. UU. que se usan ahora, pero en una forma digital accesible para todos, no solo para las instituciones financieras.
A diferencia del dinero depositado en una cuenta bancaria o gastado a través de aplicaciones como Venmo y Apple Pay, se registraría en las cuentas de la Reserva Federal, no en un banco.
Al mismo tiempo, el dólar digital valdría lo mismo que su contraparte en papel, una divergencia de las criptomonedas que actualmente tienen valoraciones altamente volátiles.
Las preguntas clave siguen sin respuesta, como si un dólar digital se basaría en tecnología de cadena de bloques como bitcoin o si estaría vinculado con algún tipo de tarjeta de pago.
Biden está pidiendo a las agencias, incluido el Departamento del Tesoro, que examinen varios temas sobre el tema.
Si el gobierno decide seguir adelante, podrían pasar "varios años" antes de que podamos usar un dólar digital; las autoridades tendrán que explorar, por ejemplo, qué tecnología usar, dijo Darrell Duffie, experto en monedas digitales de la Universidad de Stanford en California. .
¿Por qué lanzar un dólar digital?
Reduciría o incluso eliminaría las tarifas de transacción, ya que los intercambios ya no pasarían por bancos, tarjetas bancarias o aplicaciones que cobran comisiones en cada pago.
Los defensores dicen que ayudaría a las personas sin cuentas bancarias, alrededor del cinco por ciento de los hogares en los Estados Unidos, y podría facilitar que el gobierno pague los beneficios.
Existen riesgos como una falla del sistema o un ataque cibernético, y también hay dudas sobre la privacidad, ya que teóricamente el gobierno podría tener acceso a todas las transacciones.
El sistema bancario también podría verse afectado, ya que los bancos actualmente usan los depósitos de los clientes para prestar a otros, y con un dólar digital podrían tener menos dinero a su disposición.
¿Cómo se verán afectadas las finanzas globales?
Las transferencias internacionales, a menudo lentas y caras de realizar, podrían facilitarse enormemente.
Una operación que actualmente tarda dos días en validarse podría hacerse en una hora, dijo Marc Chandler, experto en divisas del corredor Bannockburn.
Para Chandler, el papel geopolítico del dólar estadounidense no se vería alterado por la introducción de la versión digital.
Un dólar digital representaría "una evolución natural más que una revolución", señaló, recordando que ya se intercambian en forma electrónica cada día más de $6,5 billones en el mercado de divisas.
Even if China launches a large-scale digital yuan, as is being discussed, he said he doesn't think that changes China's role in the world economy as "there will always be questions of trust, transparency, depth of markets."
For Stanford's Duffie, however, if the United States wants to continue to benefit from the dollar's status as the dominant currency in central bank reserves and international payments, it is essential that the government tread cautiously.
"The US are going to need to ensure that they stay in a leading position in international forums that discuss standards for making cross-border payments standards for digital currencies," he said.
Can the United States catch up?
Other countries are already working on digital versions of their own currencies, from the eurozone to India, but "there is no evidence to suggest being first to market provides any significant or material advantages," said Jamiel Sheikh, founder of CBDC Think Tank.
On the contrary, failure due to unintended consequences, low usage or other issues can undermine faith in the issuing institution, he noted.
"The overwhelming dominance of the dollar gives the US the luxury of learning from... other countries," agreed Cornell University professor Eswar Prasad.
Would the crypto world be turned upside down?
If properly designed, a digital dollar could be more preferable for domestic use than a cryptocurrency, said Duffie.
For international transfers, however, he said he was "skeptical that large central banks like the Fed or the ECB, China or Japan, will give accounts at the central bank to people all over the world."
If the United States did so, he noted, it could wreck the monetary system of small countries whose people might prefer to use the digital dollar rather than the local currency.