Experimentamos varias estructuras internas para estimar la solución óptima para la estructura que no cambia la apariencia de la cookie, pero aún permite leer los datos. Crédito:Miyatake et al., ACM UIST 2022, CC BY-ND, 2022
Actualmente hay una carrera por desarrollar etiquetas comestibles para alimentos para que, por ejemplo, puedas ver de dónde viene el alimento o sus ingredientes, y la información desaparezca una vez que lo hayas comido. Ahora, investigadores de Japón han desarrollado una forma de incluir una etiqueta comestible discreta incrustada dentro de la comida (en sus experimentos originales, galletas) que se puede leer sin tener que destruir primero la comida. Otra gran ventaja de su método, conocido como "interiqr", es que la etiqueta no cambia en absoluto la apariencia exterior ni el sabor de la comida.
Las etiquetas que contienen datos se usan comúnmente en la industria alimentaria. Van desde los más básicos, como las pegatinas en las frutas, hasta los más tecnológicos, como las etiquetas de identificación por radiofrecuencia que utilizan campos electromagnéticos para la identificación y el seguimiento automáticos de los productos. Sin embargo, a medida que el mundo intenta reducir los envases adicionales, la carrera está en marcha para desarrollar etiquetas de alimentos comestibles que no sean tóxicas, que no cambien el sabor o la apariencia de los alimentos y que se puedan leer sin tener que destruir los alimentos. El equipo de investigación de la Universidad de Osaka quería abordar todos estos problemas.
"Ahora se pueden producir muchos alimentos con impresoras 3D", explica Yamato Miyatake, autor principal del estudio. "Nos dimos cuenta de que el interior de los objetos comestibles, como las galletas, se podía imprimir para contener patrones de espacios vacíos de modo que, cuando enciendes una luz detrás de la galleta, un código QR se vuelve visible y se puede leer con un teléfono celular".
De esta forma, se utiliza como etiqueta un código QR que está hecho de la propia galleta, solucionando así cualquier problema de gusto y sabor. Aún mejor, debido a que toda la información está contenida dentro de la comida, la apariencia externa de la galleta no cambia por completo. Y debido a que se puede usar una luz de fondo simple para hacer visible el código QR, la información está fácilmente disponible para los productores, minoristas y consumidores en cualquier etapa del viaje de la galleta desde la fábrica hasta el estómago.
"Nuestro método de impresión 3D es un gran ejemplo de la transformación digital de los alimentos, que esperamos mejore la trazabilidad y la seguridad de los alimentos", dice el autor principal del estudio, Kosuke Sato. "Esta tecnología también se puede utilizar para brindar experiencias gastronómicas novedosas a través de la realidad aumentada, que es un campo nuevo y emocionante en la industria alimentaria".
Datos legibles con dispersión de luz reducida a través del patrón de alta frecuencia de la irradiación trasera. Crédito:Miyatake et al., ACM UIST 2022, CC BY-ND, 2022
Dado que las etiquetas y los envases de los alimentos son una gran fuente de desechos en todo el mundo, este nuevo método de incorporar información comestible en los alimentos también será importante para la reducción de desechos. Se espera que la adopción generalizada de tales tecnologías allane el camino hacia un futuro más limpio y lleno de cookies.
La investigación se presentará el día 35 th Simposio anual de ACM sobre software y tecnología de interfaz de usuario .