He aquí por qué:
* oxidación implica la pérdida de electrones por una sustancia.
* Reducción implica la ganancia de electrones por una sustancia.
Dado que los electrones no pueden simplemente desaparecer o ser creados de la nada, cuando una sustancia pierde electrones (oxidación), otra sustancia debe obtener esos electrones (reducción).
Piense en ello como un balancín:
* Un lado que sube (oxidación, pérdida de electrones) está equilibrado por el otro lado bajando (reducción, ganancia de electrones).
Ejemplo:
Considere la reacción entre el sulfato de zinc y cobre (ii):
* Zn (S) + CUSO₄ (AQ) → Znso₄ (aq) + cu (s)
En esta reacción:
* zinc (zn) pierde electrones y es oxidado a iones zn²⁺.
* iones de cobre (ii) (Cu²⁺) ganar electrones y se reducen al cobre metal (Cu).
Por lo tanto, la oxidación del zinc y la reducción de los iones de cobre (II) ocurren simultáneamente.
En resumen:
* Las reacciones de oxidación y reducción son dos partes inseparables de una reacción redox.
* Suceden al mismo tiempo, con una sustancia perdiendo electrones y otra ganando.
* Esto garantiza la conservación de los electrones en el proceso general.