* enlaces iónicos: Estos enlaces implican la transferencia de electrones de un átomo a otro, lo que resulta en cationes cargados positivamente y aniones cargados negativamente. La atracción electrostática entre estos iones cargados opuestos mantiene unido el compuesto.
* descomposición: Esto implica descomponer un compuesto complejo en sustancias más simples.
* Productos:
* Elementos: Cuando se rompe el enlace iónico, los iones pueden recuperar sus configuraciones electrónicas originales, formando átomos neutros de los elementos de los que originalmente estaban compuestos.
* Compuestos iónicos más simples: En algunos casos, la descomposición podría dar lugar a la formación de nuevos compuestos iónicos con diferentes combinaciones de cationes y aniones.
Ejemplos:
* cloruro de sodio (NaCl): Cuando se calienta fuertemente, se descompone en metal de sodio (NA) y gas de cloro (CL₂).
* Carbonato de calcio (Caco₃): Cuando se calienta, se descompone en óxido de calcio (CAO) y gas de dióxido de carbono (CO₂).
Nota importante: Los productos específicos de descomposición dependen del compuesto iónico específico y de las condiciones bajo las cuales ocurre la descomposición (por ejemplo, temperatura, presencia de otros reactivos).