1. Jugo gástrico: Este es el líquido producido en el estómago que ayuda a digerir los alimentos. Contiene una alta concentración de ácido clorhídrico (HCl), lo que le da un pH de alrededor de 1.5 a 3.5, lo que lo hace muy ácido.
2. orina: Si bien el pH de la orina puede variar según la dieta y otros factores, generalmente es ácido, que varía de 4.5 a 8.0. Los riñones ayudan a regular el equilibrio ácido-base del cuerpo al excretar los ácidos a través de la orina.
3. sudor: Si bien el sudor generalmente es ligeramente ácido, puede volverse más ácido durante la actividad física intensa o cuando el cuerpo está bajo estrés. Esto se debe a la producción de ácido láctico, un subproducto del metabolismo muscular.