* Energía cinética: A medida que aumenta la temperatura, las moléculas del soluto y el disolvente ganan energía cinética. Esto significa que se mueven más rápido y con más fuerza. Este aumento del movimiento ayuda a que las moléculas de soluto se separen de sus enlaces y se dispersen más fácilmente en el solvente.
* Breaking Forces intermoleculares: El aumento de la energía cinética también ayuda a superar las fuerzas intermoleculares (como los enlaces de hidrógeno o las fuerzas de van der Waals) que mantienen juntas las moléculas de soluto. Esto les facilita disolver en el solvente.
Excepciones:
* Gases: La solubilidad de los gases disminuye con un aumento en la temperatura. Esto se debe a que las moléculas de gas tienen más energía cinética y tienen más probabilidades de escapar del líquido a la atmósfera.
* sales: Si bien la solubilidad de la mayoría de las sales aumenta con la temperatura, hay algunas excepciones. Por ejemplo, la solubilidad del sulfato de litio disminuye con la temperatura creciente.
Factores que afectan la solubilidad:
* Naturaleza del soluto y solvente: Los solutos polares se disuelven mejor en solventes polares, y los solutos no polares se disuelven mejor en solventes no polares.
* Presión: La presión tiene un efecto significativo sobre la solubilidad de los gases, pero un efecto insignificante sobre la solubilidad de los sólidos y los líquidos.
* Tamaño de partícula: Las partículas más pequeñas de soluto se disuelven más rápido que las partículas más grandes.
En resumen:
Si bien hay excepciones, la solubilidad de la mayoría de las sustancias aumenta con un aumento de la temperatura debido al aumento de la energía cinética y el debilitamiento de las fuerzas intermoleculares.