* Cambio químico: Implica la formación de nuevas sustancias con diferentes propiedades químicas. Los componentes del fuego artificial reaccionan con oxígeno, rompiendo y reformando los enlaces químicos, lo que lleva a la liberación de energía en forma de luz, calor y sonido. Los materiales de fuegos artificiales originales se transforman en sustancias completamente nuevas.
* Cambio físico: Solo altera la forma o apariencia de una sustancia, no su composición química. Los ejemplos incluyen la fusión del hielo (estado de los cambios de agua pero permanecen H2O) o papel de corte (el papel está dividido, pero su composición química permanece igual).
En resumen: La quema de un fuego artificial es un cambio químico porque implica la creación de nuevas sustancias (gases, cenizas, etc.) que son fundamentalmente diferentes de los componentes originales de fuegos artificiales.