1. Reactividad de los metales :El magnesio es un metal muy reactivo, mientras que el oro es un metal relativamente noble. El magnesio tiene una energía de ionización más baja y una naturaleza más electropositiva en comparación con el oro. Esto significa que es más probable que los átomos de magnesio pierdan sus electrones de valencia y formen iones positivos, lo que los hace más reactivos.
2. Configuración electrónica :La configuración electrónica del magnesio y el oro influye en su reactividad. El magnesio tiene un electrón de valencia 3s² relativamente débilmente unido, que puede eliminarse fácilmente para formar un catión (Mg²⁺). Por el contrario, el oro tiene una configuración electrónica 5d¹⁰6s¹ completamente llena, lo que hace que sus electrones de valencia estén más estrechamente unidos y menos disponibles para reacciones químicas.
3. Propiedades de la superficie :Las propiedades superficiales del magnesio y el oro también contribuyen a sus diferencias de reactividad. El magnesio tiene una superficie más reactiva que es propensa a la oxidación y a reaccionar con gases atmosféricos como el CO2. El oro, en cambio, tiene una superficie más inerte que resiste la oxidación y es menos reactivo con el CO2.
4. Formación de compuestos :Cuando el magnesio reacciona con el CO2, forma carbonato de magnesio (MgCO3), un compuesto estable. Esta reacción es impulsada por la liberación de energía en forma de calor. El oro, por otro lado, no reacciona con el CO2 en condiciones normales porque no forma un compuesto estable con él.
En resumen, la alta reactividad del magnesio, sus electrones de valencia débilmente unidos, su superficie reactiva y la estabilidad del carbonato de magnesio contribuyen a su capacidad para reaccionar con el CO2, mientras que la naturaleza noble, sus electrones de valencia fuertemente unidos, su superficie inerte y la falta de una La formación de compuestos estables evita que el oro reaccione con el CO2 en condiciones normales.