El bicarbonato de sodio no derrite el hielo, reduce la temperatura de congelación del agua. Cuando se agrega bicarbonato de sodio al hielo, se forma una solución que tiene un punto de congelación más bajo que el agua pura. Esto hace que el hielo se derrita a una temperatura más baja. La velocidad a la que se derrite el hielo depende de la concentración de bicarbonato de sodio en la solución.