El carbono necesita formar cuatro enlaces covalentes para completar su capa exterior. Esto se debe a que el carbono tiene cuatro electrones de valencia, que son los electrones de la capa más externa de un átomo que participan en el enlace químico. Cuando los átomos de carbono se unen con otros átomos, comparten sus electrones de valencia para lograr una configuración electrónica estable. Los átomos de carbono pueden compartir sus electrones de valencia de diversas formas, pero la forma más común es formando enlaces covalentes. En un enlace covalente, dos átomos comparten uno o más pares de electrones. Cuando el carbono forma un enlace covalente, comparte uno de sus electrones de valencia con otro átomo, y ese átomo comparte uno de sus electrones de valencia con el carbono. Esto crea un fuerte vínculo entre los dos átomos y permite que el carbono alcance una configuración electrónica estable.