Se necesita un cambio químico para descomponer un compuesto. Un cambio químico implica la ruptura y formación de enlaces químicos, lo que da como resultado la transformación de un conjunto de sustancias químicas en otro. Este proceso a menudo implica la liberación o absorción de energía. Los cambios químicos suelen ser irreversibles y pueden distinguirse de los cambios físicos, que no implican la ruptura o formación de enlaces químicos. Ejemplos comunes de cambios químicos incluyen la combustión, la oxidación y la digestión.