El experimento de la botella de tornado es un experimento científico que demuestra cómo se forma un tornado. El experimento consiste en crear un vórtice en una botella de agua o vinagre haciendo girar la botella. El vórtice creará un efecto similar a un tornado, con el agua o el vinagre arremolinándose en una nube en forma de embudo.
El vinagre es mejor que el agua en el experimento de la botella tornado porque es más viscoso. Esto significa que es más espeso y resistente al flujo que el agua. La mayor viscosidad del vinagre ayuda a crear un vórtice más fuerte, lo que da como resultado un tornado más poderoso.
Además, el vinagre es transparente, por lo que permite ver el vórtice con mayor facilidad. El agua también es clara, pero a veces puede resultar difícil ver el vórtice debido a los reflejos de la luz en la superficie del agua.
Por estas razones, el vinagre es la mejor opción para el experimento de la botella tornado.