Para comprender por qué los enlaces C-H en el ciclohexano están dispuestos de forma simétrica, es necesario considerar la geometría de la molécula. El ciclohexano es una molécula con forma de anillo, con los átomos de carbono dispuestos en un hexágono. Los átomos de hidrógeno están unidos a los átomos de carbono de forma alterna, de modo que cada átomo de carbono está unido a dos átomos de hidrógeno. Esta disposición de los átomos crea una molécula muy simétrica, con los enlaces C-H apuntando en todas direcciones.
La simetría de la molécula de ciclohexano es lo que hace que los dipolos de los enlaces C-H se cancelen entre sí. Esto se debe a que las cargas positivas de los átomos de carbono están distribuidas uniformemente alrededor del anillo y las cargas negativas de los átomos de hidrógeno también están distribuidas uniformemente alrededor del anillo. Esto significa que no existe un momento dipolar neto para la molécula en su conjunto, por lo que el ciclohexano es apolar.