Las propiedades eléctricas de un MOF están determinadas por la estructura electrónica de los iones metálicos y ligandos orgánicos, así como por la geometría de la estructura. En general, los MOF con iones metálicos que tienen estados de oxidación altos y campos de ligandos fuertes tienden a ser aislantes, mientras que los MOF con iones metálicos que tienen estados de oxidación bajos y campos de ligandos débiles tienden a ser metálicos.
Las propiedades eléctricas de un MOF también pueden verse afectadas por la presencia de defectos o impurezas. Los defectos pueden alterar la estructura electrónica de la estructura, lo que provoca un aumento de la conductividad eléctrica. Las impurezas también pueden introducir nuevos estados electrónicos en la estructura, lo que puede cambiar las propiedades eléctricas.
En el caso de la estructura organometálica 2D mencionada en la pregunta, es probable que el material sea un aislante en su estado original. Sin embargo, las propiedades eléctricas de la estructura pueden modificarse mediante la introducción de defectos o impurezas. Por ejemplo, la estructura podría estar dopada con un ion metálico que tenga un estado de oxidación más bajo que el ion metálico original, o podría exponerse a un gas o vapor que reaccione con los ligandos orgánicos. Estos cambios pueden conducir a la formación de nuevos estados electrónicos en la estructura, que pueden cambiar el material de aislante a metal.
La capacidad de cambiar las propiedades eléctricas de un MOF mediante la introducción de defectos o impurezas es una estrategia prometedora para desarrollar nuevos materiales electrónicos. Los MOF con propiedades eléctricas conmutables podrían usarse en una variedad de aplicaciones, como sensores, interruptores y transistores.