Explorando cómo la convergencia de la automatización y la IA remodela la investigación en química orgánica
Los datos producidos por sistemas robóticos avanzados que emplean métodos de alto rendimiento se procesan utilizando modelos de inteligencia artificial para la toma de decisiones. Este conjunto de datos pasa por procesos de descubrimiento de conocimiento (línea verde) e incorporación (línea azul), lo que permite enriquecer la comprensión de la IA. Posteriormente, el modelo de IA se somete a actualizaciones iterativas, formando un circuito de retroalimentación continua que mejora su rendimiento y sus capacidades de toma de decisiones. Crédito:Science China Press
Recientemente, Abierto Nacional de Ciencias La revista publicó en línea un artículo de revisión dirigido por el profesor Fanyang Mo (Escuela de Ciencia e Ingeniería de Materiales, Universidad de Pekín) y el profesor Yuntian Chen (Instituto Oriental de Tecnología, Ningbo).
El equipo de investigación propuso un cambio significativo hacia la automatización y la inteligencia artificial (IA) en la química orgánica durante la última década. Además, introdujeron un concepto innovador:el desarrollo de un asistente de investigación química de IA generativo y autoevolutivo.
El panorama de la investigación en química orgánica ha experimentado cambios profundos. Los datos, la potencia informática y los algoritmos sofisticados constituyen los pilares fundamentales de la investigación científica impulsada por la IA. En los últimos años, los rápidos avances en la tecnología informática, junto con la mejora iterativa de los algoritmos, han iniciado una serie de cambios de paradigma en el ámbito científico. Esto ha llevado a una revisión completa de las metodologías de investigación convencionales.
La química orgánica, inherentemente predispuesta a crear nuevas sustancias, está en una posición única para prosperar en esta era de innovación inteligente. Los científicos de todo el mundo ahora están convergiendo en sus esfuerzos para explorar y aprovechar las capacidades de la inteligencia artificial en la química, iniciando así el movimiento de la "química de la inteligencia artificial".