Aquí hay algunos ejemplos:
* Ideonella sakaiensis: Esta bacteria, descubierta en 2016, es una de las bacterias degradantes de plástico más conocidas. Puede descomponer el plástico PET, un tipo común utilizado en botellas y ropa.
* Rhodococcus Ruber: Esta bacteria puede degradar poliuretano, un plástico que se encuentra en espumas, pinturas y recubrimientos.
* Pseudomonas aeruginosa: Esta bacteria puede degradar el cloruro de polivinilo (PVC), un plástico común utilizado en tuberías, ventanas y pisos.
Es importante recordar que estas bacterias solo pueden degradar ciertos tipos de plásticos y que el proceso es relativamente lento. La investigación está en curso para encontrar formas más efectivas de usar estas bacterias para descomponer los desechos plásticos y reducir su impacto ambiental.