Hay varios factores que contribuyen a la dominancia apical:
* Auxina: La auxina es una hormona vegetal que se produce en el meristemo apical y se transporta hacia abajo a través del tallo. La auxina inhibe el crecimiento de las yemas laterales al impedir que las células de las yemas laterales se dividan.
* Citoquinina: La citoquinina es otra hormona vegetal que se produce en las raíces y se transporta hacia arriba a través del tallo. La citoquinina promueve el crecimiento de las yemas laterales estimulando la división de las células de las yemas laterales.
* Giberelina: La giberelina es una hormona vegetal que se produce en las hojas y se transporta hacia abajo a través del tallo. La giberelina también promueve el crecimiento de las yemas laterales al estimular la división de las células de las yemas laterales.
* Ácido abscísico: El ácido abscísico es una hormona vegetal que se produce en respuesta a condiciones de estrés, como la sequía o las altas temperaturas. El ácido abscísico inhibe el crecimiento de las yemas laterales al impedir que las células de las yemas laterales se dividan.
El equilibrio entre estas cuatro hormonas determina si se produce o no dominancia apical. En la mayoría de las plantas, los niveles de auxina y ácido abscísico son más altos que los niveles de citoquinina y giberelina, lo que resulta en dominancia apical. Sin embargo, en algunas plantas, los niveles de citoquinina y giberelina son superiores a los niveles de auxina y ácido abscísico, lo que da como resultado el crecimiento de yemas laterales y una planta más tupida.