Varios estudios científicos sugieren que el TNA podría haber precedido al ARN en la química prebiótica y desempeñado un papel crucial en la evolución temprana de la vida. Aquí algunas razones que respaldan la posibilidad de TNA:
1. Química prebiótica:El TNA se puede sintetizar en condiciones prebióticamente plausibles, al igual que el ARN. Threose, el componente de azúcar del TNA, puede formarse espontáneamente a partir de moléculas orgánicas simples en ambientes acuosos.
2. Estabilidad:Se ha descubierto que el TNA es más estable que el ARN en condiciones ambientales adversas, como altas temperaturas y niveles extremos de pH. Esta mayor estabilidad podría haberlo hecho más adecuado para el desafiante entorno de la Tierra primitiva.
3. Replicación:El TNA puede sufrir una replicación dirigida por plantilla similar al ARN, lo que sugiere que podría haber servido como material genético primitivo capaz de almacenar y transmitir información genética.
4. Versatilidad:el TNA es capaz de formar varias estructuras secundarias como el ARN, incluido el emparejamiento de bases y las hélices. Esta versatilidad estructural podría haber permitido al TNA llevar a cabo diversas funciones biológicas, como catálisis, almacenamiento de información y regulación de interacciones moleculares.
5. Expansión del código genético:el TNA podría potencialmente acomodar una gama más amplia de bases genéticas que el ARN, lo que habría permitido un código genético más grande y una mayor complejidad molecular.
Estos hallazgos e hipótesis sugieren que el TNA puede haber sido un sistema genético intermedio que facilitó la transición de la química prebiótica al surgimiento de formas de vida más complejas basadas en ARN en la Tierra primitiva. Sin embargo, se necesitan más investigaciones para dilucidar completamente el papel del TNA y su importancia potencial en la historia del origen de la vida.