1. Mutación:Las bacterias sufren naturalmente mutaciones en su ADN, lo que puede provocar alteraciones en sus proteínas y otras estructuras celulares. Algunas mutaciones pueden conferir resistencia a los agentes antimicrobianos.
2. Selección y transferencia horizontal de genes:cuando las bacterias se exponen a agentes antimicrobianos, aquellas con mutaciones que confieren resistencia tienen una ventaja selectiva. Pueden sobrevivir y reproducirse mientras se matan las bacterias susceptibles. Con el tiempo, las bacterias resistentes se vuelven más frecuentes dentro de la población bacteriana. Además, las bacterias pueden adquirir genes de resistencia de otras bacterias mediante un proceso llamado transferencia horizontal de genes, que contribuye aún más a la propagación de la resistencia a los antimicrobianos.
3. Persistencia y reservorios ambientales:una vez que surgen bacterias resistentes, pueden persistir en diversos entornos, incluidos hospitales, granjas y comunidades. Pueden sobrevivir en superficies, en el agua o dentro de los cuerpos de humanos y animales. Estos reservorios sirven como fuentes de bacterias resistentes, facilitando su transmisión y posible propagación a nuevos huéspedes.
4. Uso excesivo y mal uso de agentes antimicrobianos:El uso excesivo y mal uso de agentes antimicrobianos, como los antibióticos, contribuyen al desarrollo y selección de bacterias resistentes. Cuando los agentes antimicrobianos se utilizan de forma inapropiada o innecesaria, ejercen una presión selectiva que favorece la supervivencia y proliferación de bacterias resistentes.
5. Opciones de tratamiento limitadas:la aparición de resistencia a los antimicrobianos puede llevar a opciones de tratamiento limitadas para las infecciones bacterianas. Cuando las bacterias se vuelven resistentes a múltiples agentes antimicrobianos, resulta más difícil tratar eficazmente las infecciones causadas por ellos. Esto puede resultar en enfermedades prolongadas, mayores costos de atención médica e incluso tasas de mortalidad más altas.
Para abordar el problema de las superbacterias, es fundamental implementar estrategias como el uso prudente de agentes antimicrobianos, medidas de prevención y control de infecciones, vigilancia de la resistencia a los antimicrobianos e investigación y desarrollo continuos de nuevos agentes antimicrobianos y enfoques de tratamiento alternativos.