* Regulación de la expresión genética: La producción de moléculas señal está regulada a nivel transcripcional. Los factores de transcripción específicos, proteínas que controlan la expresión genética, pueden activar o reprimir genes que codifican moléculas señal según el contexto celular y la etapa de desarrollo.
* Modificaciones postraduccionales: Una vez producidas, las moléculas señal pueden sufrir diversas modificaciones postraduccionales que afectan su actividad o estabilidad. Estas modificaciones pueden incluir glicosilación, fosforilación y escisión proteolítica, entre otras.
* Interacciones proteína-proteína: La actividad de las moléculas señal puede modularse mediante sus interacciones con otras proteínas. Por ejemplo, la unión de proteínas específicas a una molécula señal puede mejorar o inhibir sus capacidades de señalización.
* Vías de transducción de señales: Las moléculas de señal inician respuestas celulares activando vías de transducción de señales específicas. Estas vías implican una serie de eventos bioquímicos que transmiten la señal desde la superficie celular al núcleo, donde ocurren cambios en la expresión genética.
* Bucles de retroalimentación: Muchas vías de señalización incorporan mecanismos de retroalimentación que ayudan a afinar la respuesta celular y garantizar el nivel adecuado de diferenciación. Los bucles de retroalimentación positiva amplifican la señal, mientras que los bucles de retroalimentación negativa la amortiguan.
* Interacciones entre matriz extracelular y célula-célula: La composición de la matriz extracelular y las interacciones entre las células también desempeñan un papel en el control de la actividad de las moléculas señal. Pueden influir en la difusión y presentación de moléculas señal, así como modular la capacidad de respuesta de las células diana.
* Señales ambientales: La disponibilidad de factores de crecimiento, hormonas y otras señales extracelulares en el microambiente puede influir directa o indirectamente en la producción y actividad de las moléculas señal involucradas en la determinación del destino celular.
A través de estos mecanismos de control, las células aseguran que se produzcan, secreten y reciban las moléculas señal apropiadas en el momento y lugar adecuados para dirigir su diferenciación en los tipos celulares requeridos. Esta coordinación es crucial para el correcto desarrollo de los tejidos, los órganos y, en definitiva, de todo el organismo. La alteración de estos controles puede provocar anomalías del desarrollo, enfermedades y diversas formas de cáncer.