Inhibición de la adhesión bacteriana:los PAC de los arándanos pueden inhibir la adhesión de ciertas bacterias, como la E. coli uropatógena (UPEC), a las paredes del tracto urinario. La UPEC es una de las principales bacterias responsables de causar infecciones urinarias. Al evitar que estas bacterias se adhieran al revestimiento del tracto urinario, los arándanos pueden reducir el riesgo de infección.
Interrupción de la colonización bacteriana:los PAC pueden interferir con la colonización y la formación de biopelículas de bacterias en el tracto urinario. Las biopelículas son capas protectoras que crean las bacterias para protegerse del sistema inmunológico y de los antibióticos. Al alterar estas biopelículas, los arándanos pueden mejorar las defensas naturales del cuerpo contra las infecciones y aumentar la eficacia de los antibióticos.
Alteración de la expresión genética bacteriana:se ha descubierto que ciertos compuestos de los arándanos alteran la expresión genética de la UPEC, afectando la producción de factores de virulencia asociados con la uropatogénesis. Estas modificaciones pueden dar como resultado una disminución de la infectividad bacteriana y una menor colonización del tracto urinario.
Acidificación de la orina:los arándanos contribuyen a la acidez de la orina, creando un ambiente desfavorable para el crecimiento bacteriano. La naturaleza ácida del jugo de arándano puede ayudar a eliminar las bacterias del tracto urinario y reducir el riesgo de infección.
Respuesta inmune mejorada:Se ha demostrado que los arándanos estimulan el sistema inmunológico, apoyando las defensas naturales del cuerpo contra las infecciones. Contienen compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que pueden estimular la función inmune y facilitar una recuperación más rápida de las infecciones urinarias.
Es importante tener en cuenta que, si bien los arándanos y el jugo de arándano pueden ser beneficiosos para la prevención y el control de las infecciones urinarias, no deben considerarse un sustituto del tratamiento médico, especialmente en casos de infecciones graves o recurrentes. Se recomienda consultar a un profesional de la salud para determinar el curso de acción adecuado para casos individuales.