Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Oxford encontró que las personas a las que se les dijo que comían carne orgánica calificaron su sabor como mejor que las personas a las que se les dijo que comían carne convencional, a pesar de que la carne en realidad era la misma.
Otro estudio, realizado por la Universidad de California, Davis, encontró que las personas a las que se les dijo que comían carne de animales criados en un ambiente humano calificaron su sabor como mejor que las personas a las que se les dijo que comían carne de animales que habían sido criados en un ambiente humano. Había sido criado en una granja industrial, aunque la carne en realidad era la misma.
Estos estudios sugieren que nuestras creencias sobre cómo se cultiva nuestra carne pueden influir en nuestras expectativas sobre su sabor, lo que a su vez puede afectar nuestra percepción real del sabor.
Por lo tanto, si quieres disfrutar más de tu carne, puede ser útil pensar en cómo se crió y centrarte en los aspectos positivos de su producción. ¡Esto podría hacer que sepa aún mejor!
A continuación se ofrecen algunos consejos para elegir carne criada en un entorno humano:
* Busque carne que esté etiquetada como "orgánica", "alimentada con pasto" o "criada en pastos".
* Compre carne de un granjero o ganadero local.
*Pregunta a tu carnicero sobre las condiciones en las que fueron criados los animales.
Al elegir carne criada en un entorno humano, puede ayudar a apoyar a los ganaderos comprometidos con el bienestar animal y también podrá disfrutar de su carne con la conciencia tranquila.