Los medicamentos contra el cáncer suelen ser eficaces para matar las células cancerosas, pero también pueden provocar efectos secundarios graves. Uno de los efectos secundarios más comunes es la caída del cabello, que puede resultar devastadora para los pacientes.
Un nuevo estudio de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) ha identificado una enzima responsable de la caída del cabello causada por los medicamentos contra el cáncer. La enzima, llamada tirosil-ADN fosfodiesterasa 1 (TDP1), se encuentra en el núcleo de las células. Cuando los medicamentos contra el cáncer dañan el ADN, TDP1 ayuda a reparar el daño. Sin embargo, TDP1 también puede unirse y dañar el ADN sano, provocando la muerte celular.
Los investigadores descubrieron que TDP1 es más activo en las células cancerosas que en las sanas. Esto significa que es más probable que las células cancerosas sean dañadas por TDP1 cuando se exponen a medicamentos contra el cáncer.
Los hallazgos del estudio podrían conducir al desarrollo de nuevos fármacos que inhiban TDP1 y protejan las células sanas del daño. Esto podría reducir los efectos secundarios de los medicamentos contra el cáncer y hacerlos más tolerables para los pacientes.
La enzima TDP1
TDP1 es un miembro de la familia de enzimas fosfodiesterasas. Las fosfodiesterasas rompen el enlace fosfodiéster entre dos nucleótidos en una molécula de ADN o ARN. TDP1 escinde específicamente el enlace fosfodiéster entre un nucleótido de tirosina y un nucleótido de ADN.
TDP1 participa en varios procesos celulares, incluida la reparación, la transcripción y el procesamiento del ARN del ADN. En la reparación del ADN, TDP1 ayuda a eliminar los nucleótidos dañados del ADN para que puedan ser reemplazados por nucleótidos nuevos. En la transcripción, TDP1 ayuda a escindir la molécula de ARN de la plantilla de ADN. En el procesamiento de ARN, TDP1 ayuda a eliminar los intrones de las moléculas de ARN para que puedan traducirse en proteínas.
TDP1 y medicamentos contra el cáncer
Los medicamentos contra el cáncer pueden dañar el ADN de varias maneras. Algunos medicamentos contra el cáncer, como el cisplatino y la doxorrubicina, se intercalan en el ADN e impiden que se replique. Otros medicamentos contra el cáncer, como los inhibidores de la topoisomerasa, provocan roturas en las cadenas de ADN.
Cuando el ADN se daña, TDP1 ayuda a reparar el daño. Sin embargo, TDP1 también puede unirse y dañar el ADN sano. Esto puede provocar la muerte celular y los efectos secundarios de los medicamentos contra el cáncer.
Los hallazgos del estudio
Los investigadores de la UCSF descubrieron que TDP1 es más activo en las células cancerosas que en las sanas. Esto significa que es más probable que las células cancerosas sean dañadas por TDP1 cuando se exponen a medicamentos contra el cáncer.
Los investigadores también encontraron que los inhibidores de TDP1 pueden proteger las células sanas de los efectos secundarios de los medicamentos contra el cáncer. En un modelo de ratón, los inhibidores de TDP1 redujeron la caída del cabello y otros efectos secundarios causados por el cisplatino y la doxorrubicina.
Las implicaciones de los hallazgos del estudio
Los hallazgos del estudio podrían conducir al desarrollo de nuevos fármacos que inhiban TDP1 y protejan las células sanas de los efectos secundarios de los fármacos contra el cáncer. Esto podría hacer que los medicamentos contra el cáncer sean más tolerables para los pacientes y mejorar su calidad de vida.
Más investigaciones
Se necesita más investigación para desarrollar inhibidores de TDP1 que sean seguros y eficaces para su uso en humanos. Actualmente, los investigadores están realizando ensayos clínicos con inhibidores de TDP1 en pacientes con cáncer.