Alas: Los humanos habrían desarrollado alas para volar. La estructura de las alas puede variar:algunos individuos tienen alas largas y deslizantes, como los albatros, mientras que otros pueden tener alas más cortas y maniobrables, como los colibríes.
Huesos huecos: Para facilitar el vuelo, los huesos humanos serían huecos, lo que reduciría el peso y proporcionaría flotabilidad.
Poderosos músculos de vuelo: Los humanos poseerían fuertes músculos de vuelo adheridos a sus alas, lo que les permitiría generar suficiente energía para el despegue y el vuelo sostenido.
Plumas: El cuerpo humano estaría cubierto de plumas, proporcionando aislamiento, impermeabilización y aerodinámica durante el vuelo.
Pico: En lugar de una boca tradicional, los humanos tendrían un pico para comer. La forma y el tamaño del pico podrían variar dependiendo de la dieta específica de cada individuo.
Alto metabolismo: Para sostener las demandas energéticas del vuelo, los humanos tendrían una tasa metabólica más alta, lo que les obligaría a consumir más alimentos.
Vista mejorada: Las aves tienen una vista excelente y los humanos en este escenario tendrían una visión igualmente aguda para navegar por los cielos y detectar presas o peligros potenciales.
Migración: Algunas poblaciones humanas podrían participar en migraciones estacionales, volando largas distancias para encontrar climas más favorables o recursos abundantes.
Anidación y estructuras sociales: Los humanos podrían desarrollar diversas estructuras sociales, incluida la formación de colonias o la construcción de nidos para refugiarse y reproducirse.
Comunicación: Los humanos pueden desarrollar vocalizaciones o gestos únicos para comunicarse, similares a los cantos y llamados de los pájaros.
Avances tecnológicos: La capacidad de volar podría influir en la tecnología y la innovación humanas, lo que podría conducir al desarrollo de máquinas voladoras y sistemas de transporte aéreo avanzados.
Depredadores y adaptaciones: A medida que los humanos evolucionaran como aves, también enfrentarían nuevos depredadores y desafíos en su entorno, lo que impulsaría mayores adaptaciones para sobrevivir.
Es importante recordar que este es un escenario especulativo y que el camino evolutivo real de los humanos probablemente sería mucho más complejo y estaría influenciado por muchos otros factores.