Una cepa mortal de la bacteria del cólera que surgió en Indonesia en 1961 continúa propagándose ampliamente hasta el día de hoy, cobrándose miles de vidas en todo el mundo cada año, enfermando a millones y, con su persistencia, desconcertando a los científicos.
Finalmente, en un estudio publicado en Nature , investigadores de la Universidad de Texas en Austin han descubierto cómo esta peligrosa cepa ha resistido durante décadas.
Un misterio de larga data sobre la cepa de Vibrio cholerae (V. cholerae) responsable de la séptima pandemia mundial de cólera es cómo este linaje ha logrado superar a otras variantes patógenas. El equipo de UT identificó una peculiaridad única del sistema inmunológico que protege a las bacterias de un factor clave de la evolución bacteriana.
"Este componente del sistema inmunológico es exclusivo de esta cepa y probablemente le ha otorgado una ventaja extraordinaria sobre otros linajes de V. Cholerae", dijo Jack Bravo, investigador postdoctoral de UT en biociencias moleculares y autor correspondiente del artículo. "También le ha permitido defenderse de elementos genéticos móviles parásitos, lo que probablemente ha desempeñado un papel clave en la ecología y evolución de esta cepa y, en última instancia, ha contribuido a la longevidad de este linaje pandémico".
El cólera y otras bacterias, como todos los seres vivos, evolucionan a través de una serie de mutaciones y adaptaciones a lo largo del tiempo, lo que permite nuevos desarrollos en un entorno cambiante, como la resistencia a los antibióticos. Algunos de los impulsores de la evolución de los microbios son estructuras de ADN aún más pequeñas llamadas plásmidos que infectan, existen y se replican dentro de una bacteria de maneras que pueden cambiar el ADN bacteriano. Los plásmidos también pueden consumir energía y provocar mutaciones que son menos ventajosas para las bacterias.
A través de una combinación de análisis de laboratorio e imágenes de microscopio crioelectrónico, el equipo de investigación identificó un sistema de defensa único de dos partes que tienen estas bacterias y que esencialmente destruye los plásmidos, protegiendo y preservando así la cepa bacteriana.
Más información: Jack P. K. Bravo et al, Orientación y destrucción de plásmidos por el sistema de defensa bacteriana DdmDE, Naturaleza (2024). DOI:10.1038/s41586-024-07515-9
Información de la revista: Naturaleza
Proporcionado por la Universidad de Texas en Austin