Mientras que otros gigantes de gas como Júpiter, Urano y Neptuno también tienen anillos, los de Saturno son mucho más prominentes, numerosos y complejos. Están formados por innumerables partículas heladas que varían en tamaño desde granos de polvo hasta rocas, y se extienden por cientos de miles de kilómetros.
Los anillos de Saturno son tan espectaculares que han sido estudiados en detalle por una nave espacial como Cassini, revelando una variedad fascinante de estructuras y características.