He aquí por qué:
* Las nubes son un fenómeno natural: Se forman a través de la compleja interacción de condiciones atmosféricas como la temperatura, la humedad y las corrientes de aire.
* Las civilizaciones tempranas observaron nubes: Vemos evidencia de descripciones de nubes y su importancia en la mitología, el arte y la literatura de las civilizaciones antiguas como los griegos, los egipcios y los chinos.
* La comprensión científica evolucionó: Mientras que las personas observaron nubes durante siglos, nuestra comprensión de su formación y composición se desarrolló gradualmente con el tiempo. Científicos como Luke Howard en los siglos XVIII y XIX hicieron contribuciones significativas a la clasificación de la nube y la meteorología.
Entonces, en lugar de atribuir el "descubrimiento" de las nubes a una sola persona, debemos reconocer los esfuerzos acumulativos de innumerables personas a lo largo de la historia que observaron, estudiaron y contribuyeron a nuestra comprensión de estos fenómenos atmosféricos fascinantes.