* Gravedad: La inmensa gravedad de un planeta lleva toda su masa hacia el centro. Esta presión es más fuerte en el núcleo.
* Compresión: La inmensa presión en el núcleo comprime los materiales, apretando los átomos más juntos. Esto aumenta la densidad.
* Diferenciación: Durante la formación temprana de un planeta, los elementos más pesados (como el hierro y el níquel) tienden a hundirse hacia el centro, mientras que los elementos más ligeros (como los silicatos) se elevan hacia la superficie. Esto contribuye aún más al núcleo más denso.
Ejemplo:
* El núcleo de la Tierra está hecho principalmente de hierro y níquel, con una densidad de alrededor de 13 g/cm³.
* El manto de la Tierra, que se encuentra sobre el núcleo, tiene una densidad de aproximadamente 4.5 g/cm³.
* La corteza terrestre, la capa más externa, tiene la densidad más baja, alrededor de 2.7 g/cm³.
Este patrón de creciente densidad hacia el centro es común para la mayoría de los planetas. Si bien la composición y la densidad específicas pueden variar, el principio básico de la compresión gravitacional y la diferenciación de elementos sigue siendo el mismo.