La temperatura más baja jamás registrada en el universo es de aproximadamente 2,725 Kelvin, que se conoce como temperatura de radiación cósmica de fondo de microondas (CMB). La CMB es la radiación térmica remanente del Big Bang, el evento que se cree que creó el universo. Es un tenue resplandor de microondas que llena todo el universo y proporciona información importante sobre las primeras etapas de su evolución. Esta temperatura extremadamente fría es un reflejo de las condiciones poco después del Big Bang, cuando el universo era muy caliente y denso. A medida que el universo se expandió y enfrió, la radiación CMB se estiró y se desplazó al rojo, lo que resultó en su baja temperatura actual.