Armstrong y Aldrin pasaron tres días viajando a la Luna. Durante este tiempo, estuvieron ocupados con una variedad de tareas, incluyendo preparativos de naves espaciales, observaciones científicas, sesiones informativas sobre la misión, ejercicio físico, dormir y comer. Aquí hay una descripción generalizada de sus actividades durante el viaje:
Día 1 (16 de julio de 1969):
* Lanzamiento e Inserción en Órbita :La nave espacial Apolo 11 fue lanzada desde el Centro Espacial Kennedy en Florida a las 09:32 UTC. Tras alcanzar la órbita terrestre, los astronautas realizaron las maniobras necesarias para fijar rumbo hacia la Luna.
* Controles de naves espaciales :Armstrong y Aldrin comprobaron varios sistemas y componentes de la nave espacial para asegurarse de que todo funcionaba correctamente.
* Dormir :Los astronautas tuvieron su primer período de sueño programado, que duró aproximadamente 6 horas.
Día 2 (17 de julio de 1969):
* Corrección a mitad de camino :Los astronautas hicieron una corrección a mitad de camino para afinar la trayectoria de la nave espacial hacia la Luna.
* Observaciones científicas :Armstrong y Aldrin realizaron observaciones científicas y tomaron fotografías de la Tierra desde su posición privilegiada en el espacio.
* Ejercicio físico :Realizaron ejercicios físicos utilizando una cinta de correr especialmente diseñada para mantenerse en forma durante su tiempo en gravedad cero.
* Dormir :Otro período de sueño planificado de aproximadamente 6 horas.
Día 3 (18 de julio de 1969):
* Preparativos finales :Los astronautas prepararon la nave espacial para la próxima inserción en la órbita lunar y el descenso a la Luna.
* Reuniones informativas y listas de verificación :Revisaron planes de vuelo, procedimientos de misión y listas de verificación para garantizar la preparación para el aterrizaje.
* Dormir :Un período de sueño más corto, de unas 3 horas, antes de entrar en la órbita lunar.
* Órbita Lunar :Armstrong y Aldrin realizaron una serie de maniobras para entrar en órbita alrededor de la Luna. Este fue un paso crucial antes de intentar un aterrizaje en la superficie lunar.
A lo largo del viaje, los astronautas siguieron un plan de vuelo detallado y mantuvieron comunicación regular con el control de la misión en la Tierra. Sus acciones y decisiones durante este viaje de tres días fueron vitales para garantizar un aterrizaje y exploración exitosos de la Luna durante la histórica misión Apolo 11.