Cuando la envoltura, la proteína y el ARN del SARS-CoV-2 son dañados por partículas de agua atomizadas electrostáticas de tamaño nanométrico, el virus no puede unirse a las células huésped. Crédito:Universidad de Warwick
Las estrategias de desinfección actuales tienen importantes inconvenientes, razón por la cual la Organización Mundial de la Salud no recomienda la pulverización o nebulización rutinaria de agentes biocidas, ni la esterilización con luz ultravioleta, en áreas ocupadas. Una posible alternativa son las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico generadas por un dispositivo de electropulverización desarrollado por Panasonic Corporation. Las partículas de agua contienen especies reactivas de oxígeno (ROS) que dañan los lípidos, las proteínas y el ADN y se informa que desinfectan varias especies bacterianas y virales.
En su investigación anterior, el equipo del profesor asociado Yasugi mostró que las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico desinfectan el SARS-CoV-2, pero el mecanismo seguía siendo un misterio. Su nuevo artículo publicado en el Journal of Nanoparticle Research describe el daño que observaron cuando el SARS-CoV-2 estuvo expuesto a partículas de agua atomizadas electrostáticas de tamaño nanométrico.
Los investigadores mostraron que las partículas de agua atomizadas redujeron la infectividad del SARS-CoV-2 en las células mientras observaban el daño al virus. "Observamos que las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico dañaron la envoltura viral, la proteína y el ARN, lo que los hizo incapaces de unirse a las células huésped", explicó el profesor asociado Yasugi.
"Los fenómenos que observamos se consideran el mecanismo principal por el cual las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico desinfectan el SARS-CoV-2. Descubrimos que el objetivo de las partículas de agua no es la estructura específica viral específica o proteínas específicas. Debido a que el agua las partículas impactan la envoltura viral, la proteína y el ARN, también pueden desinfectar otras especies virales envueltas".
Si bien esta prueba de concepto demuestra cómo las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico destruyen el SARS-CoV-2, queda por ver el alcance total de su aplicación. "No conocemos el factor preciso que destruye el SARS-CoV-2; las ROS en las partículas pueden ser ese factor porque las ROS dañan los lípidos, las proteínas y el ADN/ARN a través de su oxidación. Además, nuestros estudios mostraron que las partículas de agua desinfectan el SARS- CoV-2 en superficies bajo condiciones experimentales cerradas. Pero la eficacia de las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico puede cambiar dependiendo de la humedad, la temperatura y otros factores ambientales; para que este método sea práctico, tendría que funcionar en numerosos ambientales", concluyó el profesor asociado Yasugi. "Nuestros estudios futuros se centrarán en el mecanismo de acción de ROS y probarán si las partículas de agua atomizada electrostática de tamaño nanométrico son efectivas contra el SARS-CoV-2 en el aire". La unión única de la variante delta puede explicar la alta transmisibilidad