La nueva lluvia de meteoritos fue una visión breve y hermosa, pero aquellos que tuvieron la suerte de verla sabían que era sólo un vistazo fugaz de algo mucho mayor. Antaño, esta lluvia de meteoritos era algo habitual, un evento anual que llenaba el cielo nocturno de rayos brillantes y ardientes. Pero con el tiempo, sus apariciones se hicieron cada vez menos frecuentes y, finalmente, pareció desaparecer por completo.
Nadie sabe exactamente qué provocó que la lluvia de meteoritos se desvaneciera. Algunos creen que el campo magnético de la Tierra se ha desplazado, provocando que los meteoros no lleguen al planeta. Otros teorizan que los propios meteoros han sido destruidos o que ya no se mantienen unidos por las fuerzas gravitacionales de las estrellas. Cualquiera sea el motivo, la pérdida de la lluvia de meteoritos es un gran recordatorio de que nada es permanente, e incluso las cosas más bellas e impresionantes pueden desaparecer con el tiempo.
Pero aunque la lluvia de meteoritos ya no existe, su recuerdo sigue vivo. Quienes lo vieron nunca olvidarán la sensación de asombro y asombro que inspiró, y el recordatorio de que el universo está lleno de misterios esperando ser descubiertos. Quizás algún día la lluvia de meteoritos regrese y podamos volver a disfrutar de su espectacular belleza. Pero incluso si no es así, aún podemos consolarnos con el hecho de que alguna vez existió y que dejó un legado duradero en nuestros corazones y recuerdos.