La fuerza que ayuda a los objetos ligeros a flotar en el agua se llama flotabilidad. La flotabilidad es una fuerza hacia arriba ejercida por un fluido que se opone al peso de un objeto parcial o totalmente sumergido. En el caso de objetos livianos que flotan en el agua, la fuerza de flotación es mayor que el peso del objeto, lo que hace que se mantenga a flote.