Transiciones singlete-triplete:
Se cree que los anestésicos inducen un cambio en el estado de espín de ciertas moléculas dentro del cuerpo, específicamente promoviendo transiciones de estados singlete a triplete. Los estados singlete tienen electrones emparejados con espines opuestos, mientras que los estados tripletes tienen electrones no apareados con el mismo espín.
Interacciones de membrana:
Los anestésicos interactúan con las membranas lipídicas de las células, particularmente en el sistema nervioso central. Estas interacciones pueden alterar la fluidez y la estructura de las membranas, lo que a su vez afecta la función de las proteínas unidas a las membranas, incluidos los canales iónicos y los receptores implicados en la señalización neuronal.
Efectos del giro electrónico:
Se cree que el cambio en los estados de espín de los electrones causado por los anestésicos altera el funcionamiento normal de estas proteínas de membrana. Por ejemplo, los cambios en el estado de espín de ciertos aminoácidos o moléculas de lípidos dentro de la membrana pueden alterar la conformación y función de los canales iónicos, afectando el flujo de iones e interrumpiendo la comunicación neuronal.
Actividad neuronal alterada:
La interrupción de la comunicación neuronal debido a cambios en los estados de espín de los electrones conduce a una actividad eléctrica alterada en el cerebro y la médula espinal. Se cree que este cambio en la actividad neuronal es la base de los efectos anestésicos como la pérdida del conocimiento, la analgesia y la relajación muscular.
Si bien este mecanismo propuesto proporciona una posible explicación para los diversos efectos de los diferentes anestésicos, es importante señalar que los mecanismos moleculares exactos y las moléculas específicas involucradas aún no se comprenden completamente. Se necesitan más investigaciones para investigar el papel de los cambios de espín de los electrones en la anestesia y determinar su contribución a los efectos anestésicos generales.