¿No puedes descansar esos miedos de los robots? No ayuda que estés viendo Skynet en reposiciones de "Terminator" o reproduciendo clips de Internet de swarm-bots. Cualquiera que sea la causa, tiene algunas preocupaciones muy reales sobre la tecnología robótica. Pero, ¿podemos realmente crear robots que parezcan pensar o actuar como humanos? Nuestro colega Jonathan Strickland, anfitrión de Fw:Thinking, explora el tema en el video de arriba.
A diferencia de los organismos biológicos, con su carne elegante y sus habilidades energéticamente eficientes, Los robots son un medio mecánico nuevo en la historia y de poder limitado. Sin embargo, un equipo de Case Western Reserve está intentando unir la robótica con carne biológica viva. En julio de 2016, los desarrolladores hicieron con éxito un robot a partir de piezas de plástico blando impresas en 3D y un músculo de la boca extraído de una babosa marina de California. Cuando los desarrolladores exponen el robot a un campo eléctrico externo, el músculo se contrae. Con este slug-bot en funcionamiento, Los científicos anticipan un futuro en el que enjambres de estas máquinas biológicas híbridas ingresan al agua y buscan de todo, desde la elusiva caja negra de un avión hasta la fuente de una fuga en un oleoducto. Mientras tanto, estos "robots vivientes" realmente extraerán nutrientes del agua circundante para alimentar sus tejidos vivos. Escuche este podcast de Fw:Thinking para obtener una explicación de audio:
Los investigadores de Harvard han descubierto una estrategia diferente para emparejar tejido vivo con hardware muy específico. Usando medusas y una raya, han creado criaturas biológicas artificiales que contienen actuadores, el hardware que hace que los robots se muevan. En este caso, los actuadores están hechos de tejido vivo de corazones de rata. Por macabro que parezca, los corazones son excelentes para mover fluidos y reaccionar a los estímulos, lo que da como resultado un organismo de movimiento natural que se puede controlar como un robot. ¿Próximo paso? Puede ser hacer cuerpos de robot de silicio con capas de tejido real, impulsado por tejido de un músculo cardíaco de rata para crear un ejército de bio-bots que nadan como si fueran reales.
Los investigadores de Harvard ya han creado mantarrayas que pueden moverse rápidamente a través de pistas de obstáculos. Las mantarrayas están equipadas con cultivos de laboratorio, Músculos del corazón de rata modificados genéticamente que reaccionan a la luz. Controlando si es oscuro o claro, los investigadores controlan dónde se mueven las mantarrayas.
Pero estos no son solo juegos ingeniosos que solo cumplirán su propósito en un laboratorio. Es posible que tecnologías de carne viva como estas sean la base de mejores corazones artificiales. En el futuro, los científicos pueden cultivar las propias células de un paciente para crear corazones híbridos biológicos que realmente cambiarán de tamaño o forma según las necesidades del paciente.
Estos robots de carne también podrían ser más ecológicos. Los robots con tejido vivo no son tóxicos, para que pudieran arrastrarse por el océano en busca de fugas de oleoductos sin temor a que una avería liberara aún más contaminantes. Y al deshacerse de los robots, sus componentes podrían descomponerse en lugar de tener que reciclarse, o permanecer en un vertedero durante miles de años (o hasta que los robots se levanten y tomen el control de todos modos).