* seco: El viento tiene mucho más fácil moverse las partículas de suelo seco que el suelo húmedo. La humedad actúa como una carpeta, manteniendo el suelo unido.
* suelto: El suelo suelto y carece de una estructura fuerte se recoge y transporta más fácilmente por el viento. Este es a menudo el caso en áreas con suelo arenoso o limoso.
* escasamente vegetado: Las raíces de las plantas ayudan a unir el suelo, evitando que se volte. Las áreas con poca vegetación se dejan vulnerables a la erosión del viento.
Ejemplos de tipos de tierras que son altamente susceptibles a la erosión del viento:
* Deserts: La falta de humedad y la vegetación hacen desiertos objetivos principales para la erosión del viento.
* Pastillas secas: Mientras que los pastos proporcionan cierta protección, el pastoreo excesivo o la sequía pueden conducir a parches de tierra desnudos, aumentando la vulnerabilidad al viento.
* Campos recién cultivados: Los campos que han sido recientemente arados o labrados están expuestos al viento y carecen de la cubierta protectora de los cultivos.
* Sitios de construcción: La construcción a menudo interrumpe el suelo y lo deja vulnerable a la erosión del viento hasta que se restablezca la vegetación.
Es importante tener en cuenta: Si bien estos tipos de tierras son más propensos a la erosión eólica, cualquier tierra que no esté manejada adecuadamente puede ser susceptible.