1. Mejora de atención médica: La ciencia impulsa los avances en medicina, desde vacunas y antibióticos hasta procedimientos quirúrgicos complejos y terapia génica. Estos avances mejoran nuestra salud, extienden nuestra vida útil y alivian el sufrimiento de enfermedades.
2. Aumento de la producción de alimentos: La ciencia agrícola ha revolucionado cómo cultivamos alimentos. A través de técnicas como la modificación genética, la agricultura de precisión y los rendimientos de los cultivos mejorados, podemos alimentar a una población mundial en crecimiento al tiempo que reducimos el impacto ambiental.
3. Protección ambiental: Comprender la ciencia ambiental nos permite identificar y abordar desafíos como el cambio climático, la contaminación y el agotamiento de los recursos. Este conocimiento nos guía en el desarrollo de prácticas sostenibles, protegiendo la biodiversidad y garantizar un planeta saludable para las generaciones futuras.