* Abundante materia orgánica: Las selvas tropicales tienen una tasa increíblemente alta de crecimiento y descomposición de las plantas. La vegetación densa produce una corriente constante de hojas caídas, ramitas, animales muertos y otra materia orgánica.
* Temperaturas cálidas: El clima cálido y húmedo de las selvas tropicales acelera el proceso de descomposición. Los microorganismos, como las bacterias y los hongos, prosperan en estas condiciones, descomponen el material orgánico rápidamente.
* Alta lluvia: La fuerte lluvia lava nutrientes de la materia en descomposición en el suelo, enriqueciéndolo aún más. Esto también crea un entorno húmedo que admite actividad microbiana rápida.
* Reciclaje rápido de nutrientes: La tasa de descomposición rápida significa que los nutrientes se devuelven rápidamente al ecosistema, alimentando un mayor crecimiento de las plantas y contribuyendo al ciclo de producción de materia orgánica.
En resumen: La combinación de abundante materia orgánica, temperaturas cálidas, altas lluvias y el rápido ciclo de nutrientes crea el ambiente perfecto para que una capa gruesa de humus se forme rápidamente en las selvas tropicales.