Cambios de uso del suelo :La deforestación, la urbanización y la agricultura pueden cambiar significativamente la geosfera. La tala de vegetación puede provocar erosión del suelo, deslizamientos de tierra y pérdida de biodiversidad. La urbanización y la agricultura pueden alterar los patrones de drenaje, la recarga de aguas subterráneas y la composición del suelo.
Consumo de agua :Las actividades humanas como el riego, la construcción de presas y el bombeo de aguas subterráneas pueden alterar el flujo de agua, cambiar el nivel freático y afectar los procesos geomórficos que dan forma a la superficie de la Tierra.
Contaminación :Las actividades industriales, el transporte y la eliminación de desechos pueden liberar contaminantes al aire, el agua y el suelo. Estos contaminantes pueden tener efectos perjudiciales sobre la salud de los ecosistemas y alterar la composición química de la geosfera.
Cambio climático :La quema de combustibles fósiles y otras actividades humanas están contribuyendo al cambio climático. Esto puede provocar un aumento del nivel del mar, el derretimiento de los glaciares, cambios en los patrones de precipitación y fenómenos meteorológicos más extremos. Estos cambios pueden tener impactos significativos en la geosfera, incluida la alteración de las costas, el cambio de los cursos de los ríos y el aumento de la frecuencia de deslizamientos de tierra y terremotos.