Variaciones genéticas :Diferentes especies de árboles e incluso árboles individuales dentro de la misma especie pueden exhibir variaciones en su respuesta a las señales ambientales. Algunos árboles pueden estar programados genéticamente para conservar sus hojas durante un período más largo antes de perderlas.
Clima y condiciones meteorológicas :El clima otoñal inusualmente cálido o templado puede retrasar la aparición de la senescencia y la abscisión de las hojas (caída de las hojas). Si las temperaturas permanecen más cálidas de lo habitual, los árboles pueden continuar realizando la fotosíntesis y conservar sus hojas por más tiempo.
Ubicación y microclima :La ubicación y el microclima específico del árbol pueden influir en la retención de hojas. Los árboles en áreas urbanas o lugares protegidos pueden experimentar temperaturas más suaves y cambios estacionales menos pronunciados, lo que retrasa la caída de las hojas.
Estrés hídrico :La sequía o el estrés hídrico pueden hacer que los árboles conserven sus hojas por más tiempo para conservar agua. Cuando los árboles experimentan escasez de agua, pueden priorizar la retención de agua sobre la caída de hojas.
Salud del árbol :Los árboles sanos generalmente presentan patrones típicos de caída de hojas. Sin embargo, los árboles estresados, enfermos o lesionados pueden conservar sus hojas por más tiempo que los sanos.
Desequilibrios químicos u hormonales :Los niveles hormonales anormales o los tratamientos químicos (como algunos herbicidas o reguladores del crecimiento) pueden interferir con el proceso natural de caída de las hojas del árbol.
Adaptación a las condiciones locales :Algunos árboles pueden haber desarrollado adaptaciones a su entorno local, lo que les permite conservar las hojas por más tiempo para sobrevivir mejor a las condiciones invernales en su ubicación específica.
Si nota que uno o varios árboles conservan hojas mientras que otros las han perdido, puede deberse a uno o más de los factores mencionados anteriormente. Tenga en cuenta que los árboles siguen sus propios ritmos biológicos internos y pueden presentar variaciones de un año a otro.