1. Falta de metabolismo: Los seres no vivos no sufren metabolismo, que es el proceso de convertir la energía en formas utilizables para el crecimiento y el mantenimiento. No necesitan comida, agua ni aire para sobrevivir.
2. Ausencia de Crecimiento y Desarrollo: Los seres no vivos no muestran crecimiento ni desarrollo. Permanecen iguales en tamaño, forma y composición a lo largo del tiempo.
3. Sin reproducción: Los seres no vivos no pueden reproducirse ni dar lugar a nuevos individuos. La reproducción es una característica exclusiva de los organismos vivos.
4. Incapacidad para responder a estímulos: Los seres no vivos no responden a estímulos externos como la luz, el tacto o los cambios de temperatura. Carecen de la capacidad de sentir y reaccionar ante su entorno.
5. Compuesto de Materia Inorgánica: Los seres no vivos están formados por materia inorgánica, que carece de la compleja organización de las moléculas orgánicas que se encuentran en los organismos vivos. La materia inorgánica se caracteriza típicamente por estructuras moleculares simples.
6. Falta de estructura celular: Los seres no vivos no tienen estructura celular. Las células son la unidad fundamental de la vida y los organismos vivos están compuestos de células.
7. Sin homeostasis: Los seres no vivos no mantienen la homeostasis, que es la regulación de las condiciones internas para mantener un ambiente interno estable. Los organismos vivos tienen varios mecanismos para mantener la homeostasis.
8. Composición química fija: Los seres no vivos tienen una composición química fija y no están compuestos de macromoléculas complejas (como proteínas, carbohidratos y ácidos nucleicos) que se encuentran en los organismos vivos.
9. No renovable: Los recursos no vivos, como los minerales y los combustibles fósiles, no son renovables, lo que significa que no pueden reemplazarse ni reponerse naturalmente a un ritmo comparable a su consumo.
10. Falta de Adaptación y Evolución: Los seres no vivos no se adaptan a las condiciones ambientales cambiantes ni evolucionan con el tiempo. La adaptación y la evolución son características de los organismos vivos.
Es importante señalar que estas características generalmente se aplican a los seres no vivos en su conjunto. Sin embargo, puede haber excepciones o variaciones en determinados casos, particularmente a nivel microscópico o subatómico.