Los civiles suelen ser inocentes. Incluso en tiempos de conflicto, muchos civiles no participan directamente en los combates. Pueden ser mujeres, niños, ancianos o enfermos que tienen poca o ninguna capacidad para defenderse. Como tales, merecen una protección especial.
Los civiles tienen derecho a disfrutar de sus derechos humanos. Todos los seres humanos tienen ciertos derechos básicos, como el derecho a la vida, la libertad y la seguridad de la persona. Estos derechos se aplican por igual a los civiles, incluso en tiempos de conflicto.
Los civiles pueden ser una fuente de inteligencia. En ocasiones, los civiles pueden proporcionar información valiosa al personal militar, como por ejemplo sobre la ubicación de las fuerzas enemigas o el movimiento de suministros. Esta información puede ayudar a proteger tanto al personal militar como a los civiles.
Los civiles pueden ayudar a construir la paz. Cuando los civiles son tratados con humanidad y respeto, puede ayudar a generar confianza entre ellos y el personal militar. Esto puede facilitar la negociación de acuerdos de paz y la reconstrucción de comunidades después de un conflicto.