* Las plantas utilizan la duración del día para ayudarlas a decidir cuándo florecer.
* Los científicos han descubierto el mecanismo molecular que permite a las plantas hacer esto.
* El descubrimiento podría conducir a nuevas formas de mejorar el rendimiento de los cultivos.
Un equipo de científicos ha descubierto cómo los cultivos utilizan la duración del día para decidir cuándo florecer. Este descubrimiento podría conducir a nuevas formas de mejorar el rendimiento de los cultivos y ayudar a los agricultores a adaptarse al cambio climático.
Las plantas utilizan la duración del día como señal para ayudarlas a decidir cuándo florecer. Esto es importante porque la floración es la etapa reproductiva del ciclo de vida de una planta y debe programarse correctamente para garantizar que la planta produzca semillas viables.
El mecanismo molecular que permite a las plantas hacer esto ha sido un misterio durante muchos años. Sin embargo, el nuevo estudio, publicado en la revista Nature , finalmente ha arrojado algo de luz sobre este proceso.
El equipo de científicos, dirigido por investigadores de la Universidad de California, Berkeley, descubrió que las plantas utilizan una proteína llamada CONSTANS para medir la duración del día. CONSTANS se produce en las hojas de las plantas y sus niveles aumentan en respuesta a días más largos.
Cuando los niveles de CONSTANS alcanzan un cierto umbral, la planta comienza a producir flores. Este proceso también está regulado por otros factores, como la temperatura y la disponibilidad de agua, pero la duración del día es la señal principal.
El descubrimiento del papel de CONSTANS en la floración podría conducir a nuevas formas de mejorar el rendimiento de los cultivos. Al manipular los niveles de CONSTANS, es posible hacer que los cultivos florezcan en momentos específicos, lo que podría ayudar a los agricultores a evitar daños por heladas u otras condiciones climáticas adversas.
El descubrimiento también podría ayudar a los agricultores a adaptarse al cambio climático. A medida que cambia el clima, la duración del día en muchas partes del mundo está cambiando, lo que podría alterar los ciclos de floración de los cultivos. Al comprender cómo las plantas utilizan la duración del día para florecer, los científicos podrán desarrollar nuevos cultivos que se adapten mejor a las condiciones cambiantes.