"Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la Tierra". (Mateo 5:5, NVI)
En este versículo, el término "mansos" se refiere a personas humildes, amables de espíritu y pacientes por naturaleza. Enfatiza el valor de una disposición humilde y gentil, destacando que tales personas encontrarán favor y bendición de Dios.
La promesa de heredar la Tierra se refiere al cumplimiento del pacto de Dios con Su pueblo, donde promete darles una tierra bendita y fructífera. En sentido metafórico, heredar la Tierra también puede simbolizar bendiciones, prosperidad y favor divino en diversos aspectos de la vida.
La referencia al "triste" en su declaración no aparece en el versículo original de la Biblia ni en su contexto. La bienaventuranza resalta el significado de la mansedumbre, no del pesimismo o la tristeza.