Vergüenza:
Justificación: Muchas personas pueden sentir vergüenza o culpa por el papel que han desempeñado los humanos en la contribución al cambio climático a través de actividades como la quema de combustibles fósiles, la deforestación y el consumo excesivo.
- Pueden percibir estas acciones como irresponsables y sentir una conexión personal con el daño causado al medio ambiente y a las generaciones futuras.
- La vergüenza puede impulsar a algunos a cambiar su comportamiento, reducir su consumo de recursos y abogar por prácticas ambientalmente sostenibles.
Esperanza:
Justificación: La esperanza es también una respuesta emocional común al cambio climático. Muchas personas mantienen la esperanza y la determinación de encontrar soluciones a pesar de la magnitud del desafío. Aquí hay algunas razones por las que la esperanza motiva:
- Centrarse en narrativas positivas y éxitos logrados en áreas como la transición o la conservación de energías renovables puede inspirar y alentar esfuerzos personales hacia la sostenibilidad.
- La esperanza promueve la acción colaborativa más allá de las elecciones individuales. Reúne a la gente para apoyar políticas gubernamentales, compromisos corporativos y medidas colectivas que aborden el cambio climático a mayor escala.
- Muchos ven la urgencia del cambio climático como una oportunidad para la innovación humana, la adaptación social y la creación de un futuro más sostenible y equitativo.
- Desarrollar la resiliencia comunitaria empodera a las personas, creando la mentalidad de que incluso las pequeñas acciones realizadas por cada persona contribuyen a una transformación significativa.